EL AGUA DEL GRIFO MUCHO MÁS SANA QUE LA EMBOTELLADA

El prestigioso laboratorio dedicado casi exclusivamente al estudio de aguas Oliver Rodés conjuntamente con el Instituto Pasteur acaban de publicar un estudio donde se demuestra que el consumo continuado de agua mineral embotellada es negativo para la salud.

Al parecer el agua del grifo contiene microorganismos beneficiosos que no contendría (o al menos no en una cantidad significativa) el agua mineral. Se cree que esto es debido al largo período que pasa entre el embotellado y el consumo. De hecho se estima que transcurre por lo menos un mes y medio entre el embotellado y su distribución en tiendas.

Lo que no nos mata nos hace más fuertes

Pero el estudio va más allá puesto que lo que sería más determinante para afirmar que el agua del grifo es más beneficiosa son precisamente los microorganismos nocivos que contiene. Según el mencionado estudio la exposición a estos microorganismos de manera continua y sostenida hace que nuestro cuerpo se inmunice. Es por ello que la gente que consume agua del grifo presentaría una mucho mayor resistencia a los ataques microbiales externos frente a aquellos que beben habitualmente agua mineral.